Sebastián Abreu, la carrera que termina, los sueños que se trasladan a la línea de cal y el llamado de Lacalle Pou

A los 44 años Sebastián Abreu le puso fin a su carrera como futbolista profesional tras 26 años de trayectoria ininterrumpida, defendiendo 31 equipos, sin contar la selección de Lavalleja, Nacional de Minas y la selección uruguaya.

Abreu, se transformó en Récord Guinness por ser el futbolista que defendió más camisetas del fútbol profesional en el mundo, en el momento donde llegó a defender a Boston River.

Este sábado, "El Loco" estuvo en la edición especial de Sport Noticias, donde hizo un repaso de su carrera, recordando momentos importantes, goles que lo marcaron, entrenadores que le dejaron aprendizajes y sueños que no pudo cumplir como futbolista, pero que tratará de cumplirlos como entrenador.

"Era el momento correcto por el ambiente que se vive a nivel institucional, el club había iniciado bien, con el objetivo de mantenerse en primera división. Consumado el hecho pude cumplir el último sueño que era jugar de local en Minas, por los temas ya sabidos se iba a suspender esa posibilidad por tiempo indefinido y ahí me di cuenta que no tenía más nada para darle al fútbol, que me había vaciado y que era el momento indicado" dijo Abreu sobre su retiro.

Sobre la situación de no jugar más en Minas dijo: "fue algo que me hizo click, me vino el bajón, dije esto era lo que me impulsaba a seguir jugando, era lo que me generaba la ilusión del día a día, cuando se corta es como que se apagó la luz, ahí el cuerpo y la mente me hizo saber que era hasta hoy".

Con respecto a los mensajes y muestras de cariño, "El Minuano" confesó qué mensaje lo sorprendió en las últimas horas: "el que me sorprendió, porque uno a veces interpreta que hay cosas mucho más importantes, fue anoche el llamado del Presidente de la República. Estaba en una cena y no conocía el teléfono, terminó llamando al celular de mi señora, atendió y le dijo que era el Presidente de la República, ahí agarré el celular y era Luis (Lacalle Pou) queriéndome saludar, felicitar y agradecer, fue una sorpresa porque no era dentro del ámbito futbolístico, es la máxima autoridad del país, me sorprendió y agradezco ese gesto".

Consultado sobre los tres goles más importantes o especiales dijo: "el gol a Costa Rica (2010), el 3-2 del clásico (con Nacional en 2004) y el tercero es uno que no sé como contarlo, pero es el penal contra Ghana, tiene un lugar especial".

En cuanto a la mayor satisfacción de su carrera, confesó: "haber podido llegar a los sueños de niño y hacerlos realidad. Con seis o siete años yo solo usaba dos camisetas, la de Nacional y de la Selección Uruguaya, haber podido llegar y cumplir esos sueños es algo que me genera mucho orgullo, no es algo fácil para niños del interior"

En cuanto a la victoria más importante y linda de su carrera, dijo: "no fue una victoria, sino un empate, pero nos dio una consolidación, fue contra Costa Rica en el repechaje par Sudáfrica. En el momento la disfruté muchísimo, pero no con la magnitud que tomó al día de hoy".

Sobre el vestuario más jodido, triste y desolador, dijo: "fue después del partido contra Perú en las Eliminatorias, perdimos 1-0 y se estaban dando resultados que nos dejaban afuera del mundial, al final nos enteramos que había un empate que nos daba chances de clasificar".

Abreu, fue consultado sobre su carrera y si quedó conforme con su trayectoria, y dijo: "estoy conforme pero con los dientes apretados de bronca con lo poquito que faltó para ser campeón del mundo. Fue de las cosas que me faltó disfrutar, no lo tomó como cuenta pendiente. Era un sueño que tenía".

"Hay sueños que no pude cumplir como jugador, ser campeón de América y del mundo con Nacional, por ejemplo, pero no son cuentas pendientes, son sueños en grande que son difíciles de conseguir y no se pudieron dar desde el lado de futbolista, automáticamente se trasladan al entrenador" agregó.