Carlos Bueno: "Hoy vemos un Peñarol sin rumbo, sin identidad y sin saber a que jugamos"

En el inicio de la charla el artiguense se refirió al momento que atraviesa Peñarol en el ámbito local, asegurando: "con Mario (Saralegui) encontramos identidad, hoy vemos un Peñarol sin rumbo, sin esa identidad y sin saber a que jugamos".

"Yo no quiero ser grosero, pero perdimos la identidad de lo que es Peñarol, no sé si es culpa de los jugadores o del entrenador, pero no logro entender como se perdió ayer como se perdió" agregó el ex delantero.

"Tampoco hay que dramatizar. Esto recién empieza. Los procesos en Uruguay duran poco. Ojalá Peñarol gane el clásico. Yo confío mucho en Larriera, lo aprecio mucho, deseo que le vaya bien" aseguró.

Sobre la salida de Mario Saralegui, afirmó: "la decisión en gran parte porque Mario no está en Peñarol es por las redes sociales. Yo creo que si no fuera por las redes sociales él seguiría, hizo un gran trabajo".

Consultado sobre la invitación de Saralegui a la concentración previa al encuentro clásico del Torneo Intermedio, dijo: "yo le dije a él que disfrute los dos partidos que le quedaban. Tengo claro que fue una decisión política que yo no entre a la concentración en el clásico, me puso contento el llamado, pero traté de no meterme en temas políticos".

El ex futbolista se sometió al cuestionario de "Las 11 Del Show" donde entre otras cosas recordó a Antoine Griezmann: "desde que empezó a jugar no se podía caminar con él, toda la gurisada lo seguía a todos lados, no se podía salir a la calle con él".

Consultado sobre el peor entrenador que tuvo en su carrera fue contundente y dijo: "Caruso Lombardi", así como también destacó a "Martin Lasarte" como el entrenador que más lo marcó en su carrera.

En cuanto al peor vestuario después de un partido aseguró que el de "San Lorenzo, peleando el descenso, estaba dividido y pasaron cosas".

Acerca de cual fue la mejor victoria en su carrera, dijo "la del clásico 4 a 2".

Carlos Bueno reconoció también que tuvo la posibilidad de jugar en Nacional dos veces, pero que no hubiese aceptado.